Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de junio, 2012

ESTA NO ES UNA CANCIÓN DESESPERADA

¿Cuántas canciones de amor se han escrito?, aquellas que fueron cantadas en la puerta de tu casa, en la complicidad de la almohada, en la cantina solitaria y en la calle que no espera nada.  Siempre hay un motivo para apropiarnos de ellas, le damos la significación que nuestros deseos anhelan, así engañamos a nuestro corazón, que por momentos se hace el desentendido y huye de la cordura. Son esas canciones que resumen las más oscuras y limpias intenciones.  Los versos rasguñan el dolor y nos presentan la ausencia, el olvido, muy bien sabe de eso Chavela Vargas al decir “otra vez a brindar con extraños y a llorar por los mismos dolores”.  Algunas desafían a la muerte poniendo en entredicho a la caprichosa piedad, antes que el abandono se aproxime. Andrés Calamaro comprendió aquello al prometer que la herida la mantendrá abierta, mientras el sudor no termine de caer, “No pidas que no sangre si aún el cuchillo no sacaste de mí, no me pidas que use cicatrizante… no me pid